¿Es posible ahorrar en pareja? Cuando comienzas a vivir en pareja todo es miel sobre hojuelas, se respira el amor en el aire y nuevos proyectos comienzan a tocar las puertas de ese nuevo hogar. Pero, ahora no solo se comparte el sueño y la almohada, sino también los gastos de la casa, las metas individuales y los planes a futuro.
Por ejemplo, la limpieza y el orden de la casa son tareas que pueden compartir para que sea más liviano. Lo mismo pasa con los pagos de luz, agua, internet, gas, comida, renta, servicios de entretenimiento, entre otros.
Si en tu caso estás comenzado a vivir con tu media naranja o ya lo haces desde hace algún tiempo, pero aún les cuesta trabajo ponerse de acuerdo en cuestiones financieras, aquí te damos algunos consejos útiles para que hagan crecer su nidito de amor o realicen ese sueño juntos.
En primer lugar, es indispensable que ambos estén en la misma sintonía y dispuestos a trabajar en equipo. Esto hará las cosas más fáciles desde el inicio y evitará horribles malentendidos. Just do your job!
Olvídate de que hablar de finanzas con tu pareja sea algo incómodo o tenso. Una comunicación honesta y fluida sobre ahorrar y planificar las finanzas del hogar es una práctica súper saludable. ¿Cuáles son sus secretitos de amor?
Entonces, ¿qué hacer para ahorrar? Bien ¡toma nota!
¡Ajusten sus presupuestos!
No todos los sueldos son iguales, por lo tanto, es básico saber cuánto gana cada uno. Así, será más fácil establecer las aportaciones para los gastos y proyectos de manera proporcional. No se trata de competir, sino de tener claro la capacidad de ahorro de cada quién. ¡Todo suma!
¿Qué quiere cada uno? Analicen sus metas
Platicar sobre los proyectos personales y de pareja ayudará a tener un amplio panorama sobre el destino de sus ahorros. Mientras tú quieres viajar, tal vez tu pareja quiere iniciar un negocio. Para esto, deben considerar las prioridades, el tiempo y el dinero que les llevará alcanzar cada meta. Hagan una lista de prioridades y plazos para cumplir cada una y sobre esa selección será más fácil fijar planes de ahorro.
¿Deudas compartidas? ¡Tal vez!
Algo súper importante antes de comenzar a ahorrar es finiquitar las deudas que existan hasta ese momento, ya sean individuales o compartidas. Se vale ayudarse a eliminar deudas porque eso les permitirá ahorrar más y crecer juntos. Y también evalúen gastos futuros en pareja y consideren si están en condiciones de adquirir nuevas deudas sin afectar su plan de ahorro. ¡Sean sinceros y congruentes!
Limitar gastos para ahorrar en pareja
Recortar gastos puede ser un sacrificio temporal para ahorrar un extra de dinero mientras alcanzan sus objetivos.
Algunas opciones que pueden ayudar para esto son optar por actividades recreativas que no impliquen un gran gasto; hacer comida en casa; aprender a negociar al momento de comprar; limitar el uso del automóvil; o posponer las vacaciones ¡Todo es cuestión de adaptarse!
Fondo de emergencia
Es indispensable contar con un respaldo que nos ayude a sobrevivir a los imprevistos sin afectar nuestra salud financiera. Abrir un fondo de emergencia y depositar entre el 10 y 20 % de los ingresos comunes es lo ideal, pero no está escrito en piedra. Platiquen sobre su capacidad de ahorro mensual y sean muy comprometidos con ese plan. ¡Adiós pretextos!
Inversiones
ahorrar en pareja también implica buscar instrumentos financieros que les permitan invertir su dinero para hacerlo crecer es una excelente idea. Solo recuerden evaluar bien las opciones en donde depositarán su dinero para obtener el máximo provecho.
¿Pensar a futuro? ¡Sí, por favor!
La tranquilidad financiera también viene con el tiempo, y más cuando desde una edad temprana se comienza a ahorrar para el futuro. Parte de vivir juntos es pensar en el mañana y cómo se ven en un futuro. Recuerden que los imprevistos pueden ocurrir y es mejor estar preparado. Comiencen un plan de ahorro juntos para que si se descompone cualquier cosita o necesitan dinero urgentemente no los tome de sorpresa.
¡Revisen sus finanzas en equipo!
Por último, es fundamental tomarse un tiempo para sentarse y analizar cómo han progresado sus finanzas. Además, es un buen momento para reflexionar sobre la dirección de los ahorros. A veces pasa que cambiamos de parecer o encontramos algún gustito que nos queremos dar, y lo mejor es siempre hablarlo con nuestra pareja.
Recuerda que algo que se comparte siempre tiene las mejores posibilidades de éxito.
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